OBJETIVOS
 

“Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.  Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;  enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.”

Mateo 28:18-20

 

Los Objetivos: El Llamado de Dios

 

Dios ha declarado que las puertas del infierno no prevalecerán contra Su Iglesia ( Mateo 16:18); este versículo revela que nos encontramos en una continua guerra espiritual. Por muchas generaciones hasta ahora, nuestras iglesias y familias le han dado terreno al humanismo.  Ahora estamos en una lucha de vida o muerte.  El futuro de nuestra iglesia y nuestras familias depende enteramente en cuan claramente se definan y alcancemos objetivos Escritúrales, por ello necesitamos cada día caminar y depender de Dios. Dios llamó a Abraham a una tierra que él no conocía, más Abraham salió en fe. En la medida que caminemos con Dios, Él nos irá mostrando el camino y propósitos preparados para nuestras vidas.

 

Como hemos ya mencionados, Dios está edificando una casa espiritual, una casa de santidad para salud no sólo a las familias sino a las naciones. Debemos ensanchar nuestro corazón en fe y visión de que Él no sólo está  poniendo las bases y las semillas que darán a su tiempo el fruto de justicia y sanidad para muchas personas, sino que eventualmente Dios mismo nos llevará a las naciones.

 

“Disponed ahora vuestro corazón y vuestra alma para buscar al Señor vuestro Dios; levantaos, pues, y EDIFICAD EL SANTUARIO DEL SEÑOR DIOS, para que traigáis el arca del pacto del Señor y los utensilios sagrados de Dios a la casa que se ha de edificar para el nombre del Señor.”

I Crónicas 22:19

 

Objetivo 1: Un Llamado a ser un Pueblo Santo

 

Dios ha  puesto en nosotros un sentir de ser Su pueblo, de ser diferentes, y vivir exclusivamente para Él, de renunciar los valores, filosofías, métodos y expresiones del mundo, y tomar los principios del Reino. Ha sido un llamado a ser un pueblo santo que viva en justicia y verdad, andando en Sus buenas obras. Creemos que ser adoradores comienza con un estilo de vida que refleje el carácter santo de Dios y la obediencia radical e incondicional de Jesucristo. Este estilo de vida que comienza desde un corazón nuevo debe reflejarse en todas las áreas de nuestra vida, como por ejemplo: un estándar alto en nuestra forma de vestir, una música cristiana que cultive el espíritu y la mente, y no provea para los deseos de la carne, una pasión por las Santas Escrituras, la honra al los padres y todas las autoridades, etc.

 

Así dice el Señor que te creó, que te formó desde el seno materno, y que te ayudará: "No temas, Jacob, siervo mío, ni tú, Jesurún, a quien he escogido. "Porque derramaré agua sobre la tierra sedienta, y torrentes sobre la tierra seca; derramaré mi Espíritu sobre tu posteridad, y mi bendición sobre tus descendientes. "Ellos brotarán entre la hierba como sauces junto a corrientes de agua." Este dirá: "Yo soy del Señor”, otro invocará el nombre de Jacob, y otro escribirá en su mano: "Del Señor soy"  y se llamará con el nombre de Israel”.”

Isaías 44:2-5

 

“Y vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros de nuestro Dios seréis llamados; comeréis las riquezas de las naciones, y con su gloria seréis sublimes.  En lugar de vuestra doble confusión y de vuestra deshonra, os alabarán en sus heredades; por lo cual en sus tierras poseerán doble honra, y tendrán perpetuo gozo.  Porque yo Jehová soy amante del derecho, aborrecedor del latrocinio para holocausto; por tanto, afirmaré en verdad su obra, y haré con ellos pacto perpetuo.  Y la descendencia de ellos será conocida entre las naciones, y sus renuevos en medio de los pueblos; todos los que los vieren, reconocerán que son linaje bendito de Jehová.”

Isaías 61:6-9

 

Objetivo 2: Un Llamado  a Levantar Hombres y Mujeres Fieles

 

Creemos fielmente que la salud de naciones, familias, y los hijos radica en levantar hombres piadosos, hombres verdaderos de Dios, que conozcan a Su creador, honren Su Palabra, y se apoyen en su Dios nada más. Tenemos naciones débiles porque tenemos iglesias débiles. Tenemos iglesias débiles porque tenemos familias débiles, y tenemos familias débiles porque hemos fallado en levantar hombres y mujeres fieles.

 

  1. Características de un Hombre Fiel de Dios:

 

El objetivo de restaurar al varón en su función de cabeza en la familia, en la iglesia y en su comunidad como un llamado de Dios, para primeramente establecer el Reino de Dios en el hogar teniendo como base familias fuertes, hacen una iglesia fuerte y por consiguiente naciones fuertes.  En Verdad Viviente tenemos el cometido de levantar y establecer familias en la Justicia  y Verdad de Dios. Para alcanzar esta meta debemos lograr el objetivo de levantar hombres piadosos que retomen el sacerdocio al que fueron llamados, hombres fieles que hagan la diferencia en todo nivel. En este sentido cada hombre debe trabajar para alcanzar las características siguientes:

 

- Reconocer que solo Dios es soberano y que la Biblia es la Palabra inspirada y la máxima autoridad para la vida.

 

- Su propósito en la vida es buscar y amar a Dios con todo el corazón y construir las metas alrededor de las prioridades de Dios.

 

- Tiene la convicción que su cuerpo es el templo vivo de Dios y no debe ser contaminado por los deseos del mundo.

 

- Sabe que su iglesia enseña las verdades fundamentales de la Biblia y ésta refuerza sus convicciones básicas.

 

- Sabe que sus hijos y nietos pertenecen a Dios y que su responsabilidad es enseñarles principios Bíblicos, carácter piadoso y convicciones básicas.

 

- Sus actividades nunca deben debilitar las convicciones Bíblicas de otro Cristiano.

 

- Su matrimonio es un compromiso para toda la vida, con Dios y con su conjugue. Y por lo tanto el divorcio no es una opción en su corazón.

 

- Su dinero es un depósito que Dios le ha confiado y debe ser ganado y administrado de acuerdo a principios de las Escrituras y para traer gloria sólo a Dios.

 

- Sus palabras están en armonía con la Palabra de Dios especialmente tratándose de la reprensión o  restauración de un hermano en Cristo.

 

- Su corazón está centrado en las cosas de arriba y no en las terrenales.

 

De la misma manera que un hombre fiel juega un papel muy importante en proclamar el Reino de los cielos, las mujeres desempeñan una función muy clave para discipular a las naciones. Entrenar mujeres fieles es el fundamento esencial para cada iglesia que quiere llenar en plenitud su potencial en el mundo de hoy.  Levantará ejemplos santos para que otras mujeres sigan: “Así obedeció Sara a Abraham, …y vosotras habéis llegado a ser hijas de ella, si hacéis el bien” ( I Pedro 3:6).

 

  1. Características de una Mujer Fiel de Dios:

 

- Debe ser una mujer madura, con experiencia, para poder instruir a las mujeres más jóvenes.

 

- Debe ser una mujer con un comportamiento santo: pura, modesta, sujeta, que ejerza auto dominio, que tenga su hogar en orden.

 

- Debe ser ayuda idónea para apoyar a su esposo y sus autoridades al éxito en sus ministerios.

 

- Su corazón está centrado en las cosas de arriba y no en las terrenales.

 

- Sabe que sus hijos y nietos pertenecen a Dios y que su responsabilidad es enseñarles principios Bíblicos, carácter piadoso y convicciones básicas.

 

- Sus actividades nunca deben debilitar las convicciones Bíblicas de otro Cristiano y debe evitar cualquier actividad que dañe el buen mensaje del evangelio: No dada al chisme, a la calumnia, a la calle.

 

- Su propósito en la vida es buscar y amar a Dios con todo el corazón y construir las metas alrededor de las prioridades de Dios.

 

- Tiene la convicción que su cuerpo es el templo vivo de Dios y no debe ser contaminado por los deseos del mundo.

 

En este sentido nuestro objetivo es presentar cada hombre y cada mujer perfecto delante de Dios; es llegar a la estatura del varón perfecto, Cristo Jesús.

 

“Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un VARÓN PERFECTO, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.”

Efesios 4:13-15

 

“A quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de PRESENTAR PERFECTO EN CRISTO JESÚS A TODO HOMBRE;  para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí.”

Colosenses 1:28

 

Objetivo 3: Un Llamado a la Familia

 

Creemos firmemente que la columna de salud y prosperidad del hombre es la familia. Dios vio que no fue bueno para Adán estar solo, y por lo tanto le hizo familia. Inclusive Dios hace habitar en familia al desamparado y a la estéril (Salmo 68:6; 113:9). La familia en la tierra es la representación de la familia divina en los cielos: Padre, Hijo, y Espíritu Santo. De familias poderosas en espíritu y con el sublime propósito y vocación de hacer discípulos, saldrán ministerios poderosos y la salud de las naciones. Tristemente muchos ministerios cristianos han caído en el error y seducción humanista de construir sus ministerios basados en programas y no en las personas, y particularmente en la familia. Y miden su éxito basado en números y cantidad. Por ello vemos maestros de escuela dominical enseñando a muchas personas, más a sus propios hijos no han enseñado. Vemos muchos predicando más a sus propias familias han perdido y descuidado. Las congregaciones están llenas de personas más no de discípulos. Llenos de reuniones mas plagados de inmoralidad, sensualidad, y todo tipo de esclavitudes. Sus edificios llenos, más sus hogares descuidados y despreciando el potencial del hogar. Como ya hemos dicho, nuestro llamado es levantar familias sólidas, poderosas en espíritu, ricas en  carácter y virtudes de nuestro Señor. De estas familias saldrá medicina y salud para las naciones.

 

“Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas; los cimientos de generación y generación levantarás, y serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar.”

Isaías 58:12

 

“Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, los escombros de muchas generaciones.  …. Y vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros de nuestro Dios seréis llamados; comeréis las riquezas de las naciones, y con su gloria seréis sublimes.”

Isaías 61:4-6

 

Objetivos  en  el entrenamiento de las nuevas generaciones - Desarrollando al máximo el potencial de nuestro hogar:

 

“La Belleza del Hogar es el Orden; la Bendición del Hogar es el Contentamiento; la Gloria del hogar es la Hospitalidad;  la Corona del Hogar es la Santidad.”

 

Muchas familias han perdido interés en el hogar porque ya no tienen las funciones vitales que Dios diseñó para él.  Cuando estas funciones Escritúrales se restauran en el hogar, no tan sólo tendrán un efecto significativo sobre la libertad financiera, sino que tendrán las herramientas necesarias para establecer el reino de Jesucristo y verdaderamente discipular las naciones. Por tanto el hogar debe tener estas cinco funciones bíblicas:

 

  1. El Hogar como Centro de Enseñanza:

Cuando una familia está funcionando conforme a la Escritura, están presentes los factores básicos del aprendizaje. Estos incluyen aceptación, seguridad, ejemplo, refuerzo, motivación, disciplina, constancia y recompensa. Aprender en casa está relacionado a la vida y está motivado por eventos planeados y no planeados. Es en este contexto que Dios  manda a los padres a hacer uso del tiempo durante el día en el cual un niño tendrá mayor capacidad para aprender. “ Y las repetirás a tus hijos (los mandamientos) y hablarás de ellas cuando estés en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte y cuando te levantes” (Deuteronomio 6:7). Si los padres delegan la enseñanza total de sus niños a otros, no solamente pierden los vínculos de  comunicación con los niños, sino que también alteraran el amor especial y la admiración que los niños naturalmente tienen por aquellos que fielmente les enseñan.

Nadie conoce las necesidades básicas del niño mejor que los padres; y la influencia potencial mas grande sobre el niño son los padres, así como los hermanos y hermanas mayores. De esta manera, los objetivos  de la enseñanza en casa deberían ser:

 A - Formar Carácter

Desde el nacimiento hasta los seis años de edad, a los niños se les debe enseñar cualidades de carácter piadoso, y sus definiciones operativas.

 

B - Resistir Solo

Para la edad de doce años el hijo o la hija debe haber aprendido a resistir solo contra el mal,       cualquiera que sea el costo.  La habilidad de resistir solo, es el patrimonio de aquellos que saben que tienen una forma de vivir “superior”.  Por tanto, es esencial que los padres inculquen en sus hijos los principios básicos de las Escrituras, junto con un amplio  conocimiento de la Biblia.

 

C - Poder Espiritual

Entre las edades de doce y veinte años, los hijos e hijas deben entender conceptos básicos de la vida.  Estos conceptos sabios vienen mediante la aplicación de los principios Escritúrales a las funciones y relaciones de matrimonio, familia, ministerio, vocación y gobierno.

 

D - Habilidades Básicas

Un producto secundario de los primeros tres objetivos debe ser el aprendizaje de las habilidades prácticas para la vida.  Estas habilidades, junto con la sabiduría y el carácter que los respalda, se convertirán en la base para el verdadero éxito.

 

  1. El Hogar como Centro de Hospitalidad:
La mejor inversión financiera que cualquier cristiano puede hacer, es en la vida de otros.  Una de las maneras más prácticas de hacer esto es abrir tu hogar a otros.  Dios promete recompensar a la familia que muestra hospitalidad.  Más aún, Él explica que esta función debe surgir de las disciplinas que la familia aprende junta. Los beneficios inmediatos de la hospitalidad en el hogar son los siguientes:
 

A - Se refuerzan metas piadosas: 

Los invitados proveen un incentivo maravillosos, tanto para los padres como para los hijos, para esforzarse hacia las metas espirituales que se han trazado para sí mismos y para su hogar.

 

B - Se aprenden lecciones valiosas: 

Cada invitado tendrá todo un cúmulo de lecciones valiosas, ideas y enseñanzas para compartir.  Si se aprende a formular preguntas precisas, se puede obtener consejo prudente y mucha información.  Los padres sabios tendrán invitados que reforzarán las enseñanzas que ellos están practicando en el hogar.

 

C - Se aprende generosidad:

La familia debe ver su hogar como un conducto por medio del cual pueden ayudar y alentar a otros, no sólo como un almacén para acumular para sí mismos.  Dios promete bendecir todo lo que una familia de en su nombre - aún un vaso de agua fría.

 

D - Se limpia el hogar: 

Los invitados toman nota de las cosas que los cristianos tienen en sus hogares.  Por tanto, al preparar la casa para los invitados, se hace una evaluación de la manera en que los libros, decoración y otros objetos del hogar reflejan el verdadero mensaje de la vida cristiana.  Un hogar cristiano debe contener artículos que Dios ha provisto como respuesta a la oración.  Estos artículos se convierten en recordatorios dinámicos para la familia, e ilustraciones eficaces que pueden ser compartidas con los invitados.

 

  1. El  Hogar como Centro de Manualidades:

Muchas empresas tuvieron sus inicios como resultado de que las personas utilizaron sus habilidades para suplir las necesidades del hogar.  No sólo pueden convertirse en una fuente de ingresos los productos del hogar, sino que también pueden ser fuente de satisfacción y realización para la familia, y pueden motivar a otros. La gama de manualidades es tan amplia como la imaginación de la familia, y las necesidades de la familia y de otros.  Las categorías generales incluirían alimentos, vestido, mercancía y  servicios.

 

  1. El  Hogar como Centro de Salud:

Un hogar armonioso conduce a la salud de los miembros de la familia.  Una familia amable y cariñosa acelerará la recuperación y mitigará el dolor de una enfermedad.  Obviamente, ciertos problemas médicos deben ser tratados en el hospital.  Sin embargo, el lugar del hogar en el plan de Dios para el cuidado de la salud es mucho mayor de lo que muchos de nosotros reconocemos.

 

 A - Actitudes sanas:

El hogar debe ser el lugar de responsabilidad en cuanto a actitudes de perdón y limpieza de la conciencia.  Si esto no se logra, la amargura y la culpa serán como venenos en el sistema, produciendo innumerables problemas médicos, psicológicos y espirituales.

 

B - Comidas nutritivas:

La mujer digna de elogio de proverbios 31 puso especial cuidado en la  planeación y preparación de alimentos nutritivos. “Es como nave de  mercader; Trae su pan de lejos.  Se levanta aun de noche Y da comida a su familia Y  ración a sus criadas” (Prov. 31:14-15) El resultado obvio de comidas bien balanceadas será la mejoría en la  salud de la familia, y disminución de las cuentas médicas.

 

C - Ayunar con regularidad:

Dios diseñó el ayuno para ciertos objetivos espirituales específicos.  Los que voluntariamente dejan una o más comidas para pasar tiempo en la meditación de la Palabra de Dios y oración, se acercarán más el Señor.  Percibirán más claramente la dirección del Señor, y recibirán las bendiciones que Él promete.  Los ayunos cuidadosamente planeados pueden ayudar a eliminar toxinas peligrosas en el sistema corporal e incrementarán la capacidad de estar alerta física y espiritualmente.

 

D - Cuidado Dental:

El costo de reparar caries dentales y tratar enfermedades de la encía está incrementando rápidamente.  La mayoría de los dentistas confirmarán que habría poca o ninguna necesidad de los servicios de ellos si se practicaran hábitos adecuados de alimentación e higiene.

 

E - Seguridad del hogar:

Los accidentes del hogar son tan dolorosos como costosos.  El ojo vigilante de los padres, y el entrenamiento cuidadoso de los niños evitarán muchos accidentes.  Sin embargo, por si llegan a suceder accidentes, deben conocerse y utilizarse los procedimientos de primeros auxilios.

 

F - Tratamiento casero:

Muchos pacientes van al hospital con un problema y salen con otro.  La dificultad para mantener condiciones sanitarias es un reto constante para los hospitales.  Siempre que sea posible,  debe considerarse el hogar para el tratamiento y la recuperación de problemas médicos.

 

G - Oración de fe:

Cuando un miembro de la familia tienen una enfermedad seria, uno de los pasos que se deben seguir es el de llamar a los ancianos de la iglesia.  Las instrucciones para este procedimiento se dan en Santiago 5:14-16.  Esto no niega el lugar del tratamiento médico, pero pone a la enfermedad en su enfoque espiritual correcto, permitiendo a muchas familias evitar cirugías innecesarias y cuentas médicas costosas.

 

  1. El  Hogar como Centro de Ministerio:

La iglesia primitiva creció en número y en eficacia, porque cada hogar era considerado como una extensión de la iglesia local.  Los primeros cristianos se reunían diariamente en diferentes hogares para exhortarse unos a otros con la Palabra de Dios, orar y compartir los alimentos.  Estamos comprometidos que desde nuestros hogares salgan equipos misioneros para levantar nuevas congregaciones y otros ministerios. Ministerios Cristianos Verdad Viviente en Nueva York nació como resultado de una familia con sed de la Presencia y Justicia de Dios. Desde entonces muchas familias han sido poderosamente levantadas por Dios como un estandarte de la Verdad.

 A - Estudios Bíblicos en el hogar:

Muchos vecinos y amigos han sido ganados para Cristo, y han recibido ayuda para su crecimiento espiritual por medio de estudios bíblicos en casa.

 

B - Proyectos Misioneros:

Dios pudiera poner en el corazón de alguna familia, un interés particular por algún misionero o campo misionero.  Los proyectos misioneros fortalecen la comunión dentro de la familia, y proveen dirección clara para ofrendar a la obra del Señor. Verdad Viviente - Misión Colombia es el resultado de una familia en su proyecto misionero. Dios en su sabiduría y tiempo levantará muchas familias con proyectos misioneros a otras ciudades y naciones.

 

C - Testimonio en la comunidad:

Existen múltiples oportunidades en una comunidad para la manifestación del amor cristiano, comprensión y ayuda, y para anunciar el evangelio.  Cuando manifestamos el amor cristiano, los vecinos nos preguntarán acerca de la razón de la esperanza que hay en nosotros.

 

D - Visitas a huérfanos y viudas:

La realidad creciente en nuestra sociedad es que más y más familias están sufriendo fragmentación.  Esto hace que el testimonio de las familias cristianas sea aún más necesario.

 

E - Cuidado de padres ancianos en casa:

En nuestra sociedad de productos desechables, la tendencia creciente es de encerrar a los padres ancianos en un asilo para ancianos. Frecuentemente no se reconocen los beneficios de ministrar a los ancianos en el hogar.  Los nietos tienen la oportunidad de ver el fruto de vidas piadosas, o las consecuencias de los pecados de la juventud. Los miembros de la familia se ven obligados a desarrollar mas actitudes piadosas, conforme responden a las necesidades difíciles de los ancianos.  Se evita la posibilidad de descuidos o atención indebida fuera del hogar.  Los nietos aprenden lealtad y respeto para sus padres al  ver a sus padres manifestar esas mismas actitudes para con sus abuelos.  Los familiares se unen más en oración y consejo conforme se hacen más críticas las  necesidades del cuidado de los ancianos.

 

F - Un estilo de vida superior:

El ministerio más eficaz se presenta cuando los vecinos y amigos observan todas las funciones que ocurren en tu hogar, y reconocen que tú tienes un estilo de vida superior.  Frecuentemente compartirán sus problemas y pedirán tu consejo.

 

Diez Características de una Familia Ideal

 

“Bienaventurado todo aquel que teme al Señor, que anda en sus caminos.  Cuando comas del trabajo de tus manos, dichoso serás y te irá bien.  Tu mujer será como fecunda vid en el interior de tu casa; tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. He aquí que así será bendecido el hombre que teme al Señor. El Señor te bendiga desde Sion, veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida,  y veas a los hijos de tus hijos. ¡Paz sea sobre Israel!”

Salmo 128: 1-6

 

A - Esposos fuertes en espíritu - Con visión y convicciones.

 

B - Esposas virtuosas - Que confíen en Dios (no en sus esposos)  y que se hayan negado a sí mismas en toda área de sus vidas, siendo capaces de reconocer a sus esposos  como “Señor”.

 

C - Padres sabios - Que escuchen y alaben a sus hijos de tal manera que sus hijos tengan la confianza de contarles todo, y apreciar sus decisiones. Los muchachos necesitan mucha alabanza.

 

D - Madres gozosas - Con un contentamiento interno. (Eva lo tenía todo, más sin embargo el enemigo creo descontentamiento en su corazón).

 

E - Hijos maduros - Con metas y compromisos sabios.

 

F - Hijas radiantes - Que sepan guardar sus corazones.

 

G - Matrimonios para toda la vida - Basado en votos de pacto y finanzas sometidas a los principios bíblicos.

 

H - Niños obedientes - Que crezcan en carácter.

 

I - Bebés seguros - Que tengan su voluntad sometida.

 

J - Casas bien mantenidas - Que estén limpias y ordenadas.

 

“Y los tuyos reedificarán las ruinas antiguas; levantarás los cimientos de generaciones pasadas, y te llamarán reparador de brechas, restaurador de calles donde habitar.”

Isaías 58:12

 

Objetivo 4: Un Llamado a Las Naciones

 

El mundo está cambiando rápidamente hoy en día.  Aunque muchas naciones están clamando por libertad y buscan maneras de traer  prosperidad a sus tierras,  algunas están enfrentando tremendos problemas.  Individuos, familias, negocios y naciones están cayendo o a punto de caer. Las presiones se están amontonando en cada aspecto de la sociedad en el día de hoy. ¿Cómo podremos soportar tal presión? ¿Dónde podemos buscar respuesta a tantos problemas y dificultades que enfrentamos?  La Biblia provee de respuestas que el mundo esta buscando.  La verdad contenida en la Biblia provee a la humanidad con principios que libertan, que realmente traen libertad a aquellos individuos y naciones que están bajo opresión.

 

“…Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;  y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.”

Juan 8:31-32

 

La Biblia nos enseña y la historia lo confirma que al grado que una nación aplique los principios de la Palabra de Dios en todos los aspectos de la sociedad es a tal grado que tal nación obtendrá libertad y prosperidad. Los principios y leyes contenidos en la Biblia abarcan toda la vida.  Esta incluye asuntos divinos entre el hombre y Dios, pero también asuntos sociales y civiles.  Así como la Verdad los puede hacer libres si es que ellos la acatan, asimismo las naciones pueden ser libres si ellas abrazan estos principios.

Jesús instruyó a Sus discípulos a tomar el mensaje del evangelio a las naciones. Y ellos no  lo limitaron a asuntos personales nada más. La Biblia revela que el mensaje del evangelio abarca todo aspecto de la vida.  Podemos resumir que las áreas que el evangelio afecta son la siguientes:

 

1. La conversión personal

2. Instituciones Divinas

a. Familia

b. Iglesia

c. Gobierno Civil

3. Guerra Espiritual

 

Cuando la iglesia sale para cumplir con la gran comisión y el mandato de dominio, ésta debería afectar cada una de estas áreas.  Estas incluyen los componentes importantes de la sociedad - el individuo, la familia, la iglesia, las asociaciones voluntarias y el gobierno civil.

 

La presión que la gente y naciones enfrentan hoy son tan grandes que ellas rápidamente se desmoronan a no ser que tengan una base bien sólida.  Esta base debería estar compuesta de principios encontrados en la Biblia.  Al trabajar para traer restauración a las naciones, debemos recordar que el cambio comienza internamente.  Las naciones que buscan cambiar su sistema económico y socio político deben reconocer que  nunca  podrán alcanzar sus metas si es que la gente no tiene el fundamento adecuado en carácter y pensamiento. La liberación bíblica comienza con la liberación del pecado en la vida de cada individuo  redimido (comprado) por Dios.  La liberación no termina allí pero debe comenzar allí.  Sin la liberación espiritual de Satanás y del pecado, no puede haber la liberación a largo plazo de la esclavitud económica y política.

 

Los cristianos debemos afirmar enfáticamente  que al liberarnos de Satanás y del pecado, obtendremos también la liberación de la esclavitud económica y política.  El cristianismo produce buen fruto en cada área de la vida.  No debemos limitar los efectos de la sanidad de Dios sólo al alma de cada individuo que ha sido salvo.  La sanidad del alma de cada persona redimida se esparcirá a cada área de su vida, y de ahí a toda la sociedad.  Nosotros no nos referimos a una salvación que nos aleja de este mundo, más bien a una salvación que trae la Verdad a este mundo. Por ello somos Verdad Viviente porque somos llamados a vivir y a comunicar la Verdad.  Jesús dijo:

 

“No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.  Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.  Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo.”

Juan 17:15-18

 

Paso a paso, persona a persona, una familia a la vez, los cristianos debemos discipular a las naciones.  Esto significa que debemos traer a los hombres a la libertad de las estipulaciones redentoras del Nuevo Pacto de Dios.

 

Lo que menos se necesita en este mundo es otra iglesia que refuta los errores del pecado, el humanismo, o la teología de liberación (comunismo).  Lo que este mundo sí necesita es un programa integral basado en la Biblia y bendito por Dios para construir un mundo mejor aquí y ahora. Los cristianos necesitamos esquemas para la sanidad social. Dios no nos llama a escapar de nuestros deberes en este  mundo.  El Señor no nos llama a abandonar los deberes terrenales.  El nos llama a ejercer dominio sobre cada aspecto de la tierra en Su Nombre, para Su gloria, y por medio de Su Ley:

 

 “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.  Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.  Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.”

Génesis 1:26-28

 

Objetivo  5: Un Llamado a las Viudas y Pobres

 

En Mateo 25: 34-40 se nos confronta con una de las verdades más emocionantes y más soberanas de las Escrituras:  “Entonces el rey dirá Porque tuve hambre, y me disteis de comer tuve sed y me disteis de beber.  Entonces los justos le responderán Señor ¿Cuándo te vimos hambriento y te sustentamos.  O sediento, y te dimos de beber?  Y respondiendo el Rey les dirá.  De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos mas pequeños, a mi lo hicisteis.  Entonces dirá también a los de la izquierda.  Apartaos de mi, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.  Porque tuve hambre y no me disteis de comer tuvo sed, y no me disteis de beber.  De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mi lo hicisteis.”

 

De una manera misteriosa no podemos comprender totalmente a Jesús, el Creador de todas las cosas, se identifica a sí mismo con los pobres, con las viudas, con los desamparados.  Cuando compartimos con los pobres, en realidad estamos compartiendo con Jesús mismo.  Y si esta verdad es impresionante, lo contrario es aterrorizante, es decir, si no damos a los pobres, en realidad estamos dejando a Cristo hambriento y sediento.

 

Durante el ministerio terrenal de Cristo,  El dio constantemente a los pobres.  Es interesante notar cómo esto se revela durante la última cena, después de que Jesús le dijo a Judas que llevara a cabo su traición, se hace este comentario:  “Pero ninguno entendió por qué le dijo esto porque algunos pensaban puesto que Judas tenía la bolsa, que Jesús le decía,  Compra lo que necesitamos para la fiesta, o que diese algo a los pobres.” ( Juan 13:28-29).

 

Dar a los pobres era una cosa tan natural y común en la vida de Jesús que sus discípulos automáticamente asumieron que mandaba a Judas ya sea a comprar comida para ellos, o a darle a los pobres, - ninguna otra alternativa cruzó por sus mentes.  No es entonces de extrañarse, que cuando Pablo anunció a los discípulos sobre su llamado a los gentiles y ellos confirmaron este ministerio, que se dijera lo siguiente “solamente nos pidieron (los discípulos) que nos acordásemos de los pobres, lo cual también procurare con diligencia hacer”  (Gálatas 2:10).

 

Imagínese todos los asuntos teológicos que los discípulos podrían haber discutido con Pablo, pero solamente le dijeron que debía acordarse de los pobres.  ¡Esto, nos debe enseñar algo! Hay tres áreas en la vida de un cristiano que pueden ser afectadas ya sea por el dar o el no dar a los pobres. 

- La Oración: El no recibir respuesta a nuestras oraciones podría ser consecuencia de no dar a los pobres: “No es mas bien el ayuno que yo escogí. Que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa.  Entonces invocarás, y te oirá Jehová…” (Isaías 58:6-9). “el que cierra su oído al clamor del pobre, también él clamará, y no será oído” ( Proverbios 21:13).  

- Provisión: Nuestra provisión depende de lo que damos a los pobres.  “El que da al pobre no tendrá pobreza; mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones” ( Proverbio 28:27).

 

- Conocer a Jesús íntimamente: Quien no comparte con los pobres no conoce a Jesús íntimamente.  “El juzgó la causa del afligido y del menesteroso, y entonces estuvo bien.  ¿No es esto conocerme a mí? dice Jehová”  (Jeremías 22:16). 

El fracaso del gobierno con los programas de ayuda social nos ha afectado y en parte por esto no damos a los pobres.  Sin embargo, creemos que esto es trabajo de la iglesia y no del gobierno.  El gobierno trata a los pobres de manera impersonal.  La iglesia tienen el potencial de ser sensible a la dignidad de los pobres.  Además se puede establecer una relación personal para así llenar las necesidades físicas inmediatas de los pobres.  Y la iglesia puede dedicarse a llenar las necesidades físicas y espirituales a largo plazo, en amor, entrenando y dando responsabilidades a aquellos que pueden llegar a trabajar y así mantenerse.

 

Creemos que cada discípulo del Señor debería  pedirle al Señor que traiga a una persona pobre a su vida; y pudiéramos hacerlo repitiendo esta oración: “Padre, con tu gracia pon en mi el deseo de compartir con los pobres.  Trae a una persona necesitada a mi vida, para que así yo aprenda verdaderamente lo que significa dar”.  Esto será un importante paso en la madurez de nuestra relación con Cristo.

 

Como  iglesia de Jesucristo debemos repetir y vivir las palabras de Job:  “Porque yo libraba al pobre que clamaba, y al huérfano que carecía de ayudador… y al corazón de la viuda yo daba alegría.. yo era ojos al ciego, y pies al cojo.  A los menesterosos era padre, y de la causa que no entendía, me informaba con diligencia” ( Job 29:12-16). A pesar de que esta área del dar puede ser muy frustrante algunas veces, los posibles beneficios que podría recibir quien da, la convierten en una de las áreas más emocionantes y satisfactorias de la vida cristiana.